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García, quien en el año 2019 integró la comisión de expertos que diseñó la reforma constitucional habilitante del proceso constituyente, se refirió a las características del diseño indicando que “creo que si volvemos a la imagen del uso de las tecnologías- de los apartheid tecnológicos que tiene nuestra constitución- nuestra constitución lo que hizo de este proceso constituyente fue hacer una vía intermedia que la tienen muchos otros países como Austria, Suiza, España, Colombia y Argentina, entre muchos otros, que es incluir en el capítulo de reforma a la constitución ya no sólo al mecanismo ordinario tradicional, sino que un mecanismo de revisión total en reemplazo de nueva constitución”.
Respecto al contexto de la pandemia y la realización o no del plebiscito, el abogado constitucionalista precisó que “eventualmente a fines de julio debiese existir un acuerdo- como ocurrió en marzo- de al menos postergar el plebiscito, eso también tiene una serie de consecuencias y desventajas. Las postergaciones para el próximo año hacen que nuestro calendario electoral sea complejo, pero creo que la única razón objetiva que permitiría postergar el plebiscito que se efectuará el 25 de octubre de este año son estrictamente razones sanitarias.
Agrega que “este es el marco del acuerdo que se fijó el 15 de noviembre, así fue el acuerdo de las fuerzas políticas democráticas que postergaron de abril a octubre este plebiscito y todo parece indicar que a finales de julio la crisis sanitaria va seguir estando en una posición delicada. Pero también es importante tener a la vista por qué se debe suspenderlo eventualmente a fines de julio, esto porque en agosto comienza el plazo de 60 días de la propaganda electoral por medios de prensa, redes sociales, pero también se requiere libertad de reunión, libertad de expresión y una serie de libertades y vamos a tener unido el estado de catástrofe que se acaba de decretar por 90 días y esa campaña, entonces tendremos un problema importante”, acotó.
El experto también añade que “en un escenario de pandemia, de crisis sanitaria, donde el distanciamiento social va a ser parte de nuestra realidad y el ejercicio de las libertades políticas van a estar suspendida, primero por el estado de catástrofe que dura hasta el 16 o 18 de septiembre y, por otro lado, muy pocos activistas van a querer salir a la calle, entonces tenemos un problema objetivo que se debe tomar una determinada decisión ojalá hacia fines de julio o puede ser en agosto, pero ya en agosto comienza la campaña”.
En relación a quienes están reacios a una nueva postergación y quieren forzar de igual manera el plebiscito de octubre a través del voto electrónico, el abogado señala que “Chile tiene una mala experiencia de voto electrónico, creo que no es el momento de innovar por esta vía, pero por otro lado si tuviéramos estándares bajos de participación, imagínese un plebiscito de participación del 25% o 30%. En general nuestras últimas elecciones el 60% o un poco más de los chilenos o no ha ido a votar o ha votado solamente en una elección en los últimos años, entonces que en la nueva constitución o el proceso constituyente nazca con esos niveles de participación ciudadana me parece solo una receta para que todo el proceso constituyente fracase. En este momento tenemos que concentrarnos en la crisis económica, la crisis social y esperar lo que vaya a pasar con la crisis sanitaria para recién tomar decisiones más bien de postergar, pero no suspender el plebiscito”, concluyó.
Por su parte, el rector de la UVM, Carlos Isaac, en su discurso inaugural se refirió a la situación país “los últimos 8 meses han sido de grandes contingencias a nivel país y mundial. En lo que respecta a Chile, nuestra sociedad ha cambiado, especialmente a partir de octubre del año pasado. Desde este punto, cobra enorme vigencia que la Educación y en especial la Educación Superior es la principal palanca de movilidad de la sociedad, en miras de la construcción de un país en donde prime el respeto, la reflexión y empatía”.
Además, agrega que “hoy vivimos un escenario distinto, pero no por eso menos contingente. La pandemia coronavirus Covid -19 ha impactado fuertemente nuestro quehacer diario, nuestras rutinas, tanto laborales como familiares. Hemos tenido que readecuarnos a nuevos sistemas de trabajo e instaurar protocolos sociales, que involucran distanciamiento y una serie de medidas, que para muchos han sido difíciles de implementar”.
Por último, la autoridad UVM añade que las necesidades primordiales de las comunidades han cambiado. Es ahí donde las instituciones de Educación Superior, nuestros estudiantes, profesionales y académicos deben tomar un rol fundamental ante estos cambios. Continuar aportando al desarrollo de nuestra región y del país a través de la innovación, compromiso e integridad, es nuestra principal misión y lo ha sido durante nuestros 32 años de trayectoria académica”, puntualizó.
